Éste es el antes y el después de alguien que casi no lo cuenta; alguien con ganas que sigue en proceso de recuperación. El resultado que mi amada y revoltosa Dama, en poco más de un mes de trabajo, ha experimentado gracias a los sabios conocimientos de Rocio Puché.

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En marzo de 2023, Dama acude a la consulta del que fue durante seis años nuestro Centro Veterinario habitual por perdida de peso y grave hiperplasia (sobrecrecimiento de tejido) gingival. Se procedió a realizar, entre otras pruebas, una endoscopia tras observar inflamación intestinal y poder así descartar un posible linfoma o IBD. El informe patológico no fue concluyente, pero la veterinaria que llevaba el caso creyó que comenzar con el protocolo alopático para el linfoma intestinal con corticoides y quimioterapia oral, era su mejor opción.

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En enero de 2024, una mañana tras 10 meses de tratamiento, observé perpleja a Dama vomitar y defecar abundante sangre.  Fue entonces, cuando el malestar, las náuseas, la falta de apetito,  la acelerada y alarmante perdida de peso y los frecuentes vómitos la comenzaron a atormentar. Duele recordar lo mucho que sé que deseaba volver a devorar lo que con tanto amor le cocinaba.

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En el Centro Veterinario observaron una severa inflamación en hígado, páncreas e intestinos. Presentaba, además, una lesión de halo medular en ambos riñones. La veterinaria le prescribió antibióticos para una posible triaditis y antieméticos para suprimir los vómitos. Le pregunté si los efectos adversos del uso prolongado de corticoides y/o quimioterapia oral que Dama había tomando durante 10 meses y que debía, según ella, seguir tomando, podría ser la causa de su grave estado actual. Me dijo que no, y con seguridad, además. Llegados a este punto, decidí echar mano del tan desaprovechado sentido común y buscar ayuda desesperada en la formación y medicina natural que practica El Nahual. Estaba convencida de que si Dama salía de ésta, no sería gracias al camino que escogimos hasta entonces.

 

Dama sigue aquí, estable, sin tóxicos y en proceso de sanacion. Un privilegio que merece, cuanto menos, mis respetos y gratitud infinita. 

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***************************** Gracias Sonia por tu testimonio ********************************