Cuando los marineros salen a navegar llevan un mapa, salen confiados a alta mar porque conocen el terreno y saben a dónde quieren llegar. Todos navegan hacia su objetivo y vuelven a casa sanos y salvos.

 

Cuando el ser humano se encarna, nadie le da un mapa. Y a medida que se hace adulto emprende aventuras y debe tomar decisiones sin saber exactamente si son las adecuadas para él o incluso sin saber cómo afrontarlo. Todo apunta a que le tocará navegar sin rumbo, con grandes posibilidades de naufragar.

 

Sin embargo, dentro de nosotros sí existe ese mapa. Nuestra vida está marcada por una serie de códigos que nos marcan el rumbo de nuestra existencia, pero la inmensa mayoría de las personas lo desconocen, y esto hace que naveguen perdidas en su propio viaje, en su propia vida.

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 El código del ser humano está conformado por números, números ocultos en la fecha de nacimiento y en el nombre. 

Nada en esta vida ocurre al azar, todo está conectado y todo tiene un sentido de ser, CONFÍA.

 

Conociendo tus números, conociendo tu código, podrás descubrir el mapa de tu personalidad a un nivel profundo, entendiendo cada uno de los engranajes que te llevan a actuar de la manera que lo haces, para así poder ponerle luz y transformar todas esas situaciones incómodas de bloqueos en oportunidades. Descubre dónde está tu fuerza y tu debilidad para poder evolucionar al siguiente nivel.

 

Si fueras un marinero y estuvieras en medio de una tormenta ¿te gustaría saber usar la fuerza de la tormenta a tu favor, o te dejarás arrastrar por ella? ¿te gustaría saber dónde están los tesoros y los peligros?